DEFINICIÓN
DE AMOR
El amor es un
sentimiento universal. Traspasa todas las épocas y los géneros. Representa la manifestación
de los sentimientos del ser humano y la búsqueda en la vida. Además representa
la interioridad del hombre y es fuente de diversos sentimientos, desde la
alegría del amor correspondido hasta el dolor del que está ausente.
A lo largo de
los siglos el amor ha sido fuente de inspiración para toda clase de artistas,
esto porque el amor es considerado el vínculo fundamental de la unidad
universal; un poder casi irresistible que puede desencadenar grandes desastres
o precipitar el alcance de la anhelada felicidad.
En la tradición literaria, el amor es un motivo
recurrente que ha sido abordado desde diversos puntos de vista. Hemos de
tener presente que esta variedad de expresiones del amor en las obras literarias
depende, en gran medida, de la época histórica a la que pertenecen. Por otra
parte, en una misma obra, generalmente encontramos más de un tipo de amor.
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TIPOS DE AMOR SEGÚN LOS GRIEGOS
EROS: deseo sexual y pasión
En la mitología griega, Eros era hijo de Afrodita, la diosa del amor y representaba la pasión, la lujuria y el placer. En cuanto a su significado, es la apreciación por el físico o la belleza y está impulsada por la atracción y el anhelo sexual. Un amor intenso, carnal y generalmente efímero. Algo tiene que ver con la idealización del momento, detonada por la pasión y el impulso del deseo carnal. El eros es en esencia sexual. Los griegos consideraban que este tipo de amor era negativo ya que es un amor irracional, peligroso y ardiente, un amor que puede consumir y apoderarse de uno. El Eros, según los griegos, implica una pérdida de control.
PHILIA: amor fraternal de amistad
Philia se caracteriza por la intimidad, el conocimiento y los lazos entre almas. Esta es considerada la segunda categoría del amor. La filia es considerada el amor de amistad y explicaba la relación profunda entre los “hermanos de armas” (guerreros) de esos tiempos, por eso se demostraba en la lealtad, en el sacrificio en tiempos de guerras y se basaba en compartir emociones. Los griegos valoraban este tipo de amor mucho más que el amor sexual presentado en el Eros. Este amor es alentador, amable y auténtico, el mejor material para forjar una profunda amistad, sin importar si es con un amigo o una pareja. Este amor también se basa en la buena voluntad, o querer lo mejor para la otra persona y es una conexión similar a la de las almas gemelas. Solidaridad, hermandad y amor por el prójimo son algunas de las premisas fundamentales de este tipo de amor.
LUDUS o
erotoropía: amor como juego
La palabra «ludus» es de origen latino y en realidad se conoce como erototropia en griego. Dicha palabra hace referencia al amor infantil que a veces se ve en las etapas iniciales de las relaciones románticas. Este también puede ser un tipo de amor sin compromiso. Sin embargo, sin duda, la erotoropia y el ludus también podrían ser el amor que experimentaríamos con una aventura casual, sexual, emocionante y sin obligaciones, un amor que se vive como un juego o deporte, un amor que busca la conquista.
STORGE: amor
familiar incondicional
Es el concepto griego utilizado para el afecto natural. Storge se parece más a un tipo de amor familiar, un tipo de amor que nos hace sentir seguros y cuidados, y que no es apasionado en naturaleza. Storge está impulsado por la familiaridad y la necesidad y, a veces, se lo considera un amor unidireccional. Hasta cierto punto es el epítome de la relación empática, un sentimiento protector y que detona la lealtad. Por ejemplo, considere a una madre que ama a su bebé antes de que el bebé sea lo suficientemente consciente como para amarla a ella. Storge también puede describir un sentido de patriotismo hacia un país o lealtad a un equipo.
PHILAUTIA: amor
propio
Los griegos notaron que cuando nos amamos a nosotros mismos, mejoramos nuestra capacidad de amar a otros, pero también notaron que había un “hermano malvado” del amor propio, el cual vivía obsesionado de sí mismo, este amor está entonces asociado con el narcisismo. La palabra “autocompasión” podría ser un mejor término para esta forma de amor, que abarca dos conceptos. El primero es ese amor saludable, basado en el autocuidado, que refuerza la autoestima, pero no tiene que ser materialista y el concepto restante es el del egoísmo, que puede ser la búsqueda de placer y fama o estar constantemente preocupado por el estatus, incluso puede ser la base del narcisismo.
PRAGMA: amor duradero
Pragma es un amor basado en el compromiso, la comprensión y los intereses a largo plazo, como formar una familia. El pragma es considerado el “amor maduro”, ese amor que se da con el tiempo y la interacción, por lo tanto, es el amor que se desarrolla entre parejas que llevan mucho tiempo juntas. Este se destaca porque los individuos hacen un gran esfuerzo por entender al otro y darlo todo, a medida que una pareja crece para honrarse, respetarse y apreciarse mutuamente, aceptando las diferencias y aprendiendo a comprometerse. Pragma es amor eterno arraigado en sentimientos románticos y de compañerismo.
ÁGAPE: amor
empático y universal, espiritual
Agápe es amor por los demás que
incluye el amor por Dios, la naturaleza, los extraños o los menos afortunados.
En general, es un amor empático hacia la humanidad misma y, a veces, está
conectado con el altruismo, ya que implica cuidar y amar a los demás sin esperar
nada a cambio. Su vehículo es la pureza, la incondicionalidad e, incluso, la
devoción. Esta forma de amor es universal, como el amor por una deidad, por la
naturaleza o por la humanidad completa. El profesar este tipo de amor suele
enriquecer a la persona y quizá sea parte de la esencia misma del ser humano,
ya que este tipo de amor es la base de grandes sociedades y comunidades.
