“A mí me gusta mucho pensar que algún día un padre le dará dinero a su hijo, lo llevará a una librería y le dirá: ‘Elige un libro’. Ese libro, seguramente, se irá a una casa, de la mano de ese niño, esperando ser leído. Y ahí nace la relación que generará un nuevo lector. Creo que lo más importante es ofrecer a los niños la experiencia de la escucha. No se puede aprender a leer bien y con gusto sin haber vivido, sin haber tenido una experiencia de gozar con la escucha de un adulto que lea al niño. Pero como no todas las familias pueden acceder a ese derecho, es obligación de la escuela hacerlo para todos los niños, de manera que todos tengan una experiencia básica fundamental para pasar a la parte técnica del aprendizaje de la lectura”.
Francesco Tonucci